martes, 21 de octubre de 2008

Con apego a la Ley

En un artículo publicado en el diario Granma de hoy informa sobre la persecución que se está llevando a cabo contra los vendedores informales en Cuba, fuente de alimentación para la gran mayoría de la población cubana. En este reporte se trata de justificar las miles de sanciones que se están llevando a cabo en el país en nombre de las calamidades sufridas por el paso de los huracanes Gustav y Ike.

Con conocimiento en la materia le digo al señor Lic. Eduardo Rodríguez González, Vicepresidente del Consejo de Gobierno de Tribunal Supremo Popular que la interpretación sobre el artículo 53. e) del Código Penal: "Cometer el hecho aprovechando la circunstancia de una calamidad pública o de un peligro inminente de ella, u otra especial" no se ajusta a las circunstancias que ahora mismo vive el pueblo cubano. Según ese mismo diario el país ya está casi recuperado de las secuelas del paso de los huracanes.

Esas circunstancias agravantes del código penal se pudieran haber aplicado en el momento del paso de los huracanes o dentro de las 48 horas después como máximo y se ajustaría a los hechos de robos u otros delitos que nada tiene que ver con la venta de productos de primera necesidad que las empresas estatales cubanas son incapaces de distribuir por carestía, por precios inalcanzables para la población o por su incompetencia .

Sabemos que detrás de esta interpretación que el Consejo de Gobierno de Tribunal Supremo Popular sobre el mencionado artículo, que es obligatoria también a las instancias inferiores, está la orden del Partido Comunista de Cuba y del presidente del país, probando una vez más la falta de independencia de sus órganos de justicia.

La batida del régimen castrista contra el mercado negro en Cuba había comenzado meses antes del paso de los fenómenos atmosféricos, diría yo que aprovechando el paso de estos fenómenos naturales el gobierno cubano está dando la batalla para justificar los actos represivos hacía la población cubana, por lo que considero que esta agravante sería justo aplicarlo sobre ellos cuando sus días tiránicos concluyan.

miércoles, 15 de octubre de 2008

Hablando de Precios.


Lamento profundamente que el paso de dos huracanes con altos poderes destructivos y en apenas días de diferencia hayan prácticamente arrasado la ya destruida economía cubana desde oriente hasta occidente. Si antes del paso de los fenómenos atmosféricos la situaron de la alimentación de las familias cubanas ya era difícil ahora es insostenible. Las medidas gubernamentales de congelación de los precios de los Mercados Agropecuarios, que funcionan bajo la ley de la oferta y la demanda, fueron aceptadas de buena fe por la mayoría del pueblo cubano, pero en la práctica ha sido una nueva desacertada política del régimen comunista.

Tal brillante medida ha acelerado el desabastecimiento de esos mercados formalizados e incentivado el mercado negro, ahora se quiere castigar con cárceles o con fuertes sanciones económicas a todo aquel que venda productos en el mercado informal trayendo como consecuencias el aumento de la población penal y la escasez de los alimentos que por esa vía llegaban a los hogares familiares. Los juicios sumarios, ejemplares y parciales por esas causas se multiplican por día y no evitarán que los vendedores informales sigan realizándolo.

La populista idea de congelación de los precios en los mercados agropecuarios vino precedida por el impopular aumento del precio del combustible, monopolio del Estado, precisamente justificado por el aumento de los mismos en el mercado internacional. Para el régimen autoritario y omnipresente de la Habana es justificado aumentar precio con huracán o sin él, pero no es justo cuando sucede por los productores privados que se rigen por la ley de la oferta y la demanda.

Ya se sabe que el aumento de los precios del combustible acelera la inflación, de momento el régimen ha anunciado que no aumentará precios en los mercados de recaudación de divisas, pero estimados compatriotas de la isla amarradse los cinturones, la subida vendrá y no precisamente por que la ley de la oferta y la demanda así lo exija. El gobierno cubano tiene el monopolio de los precios y hasta ahora no ha respetado los bajísimos salarios de los trabajadores a la hora de su formación, como buenos capitalistas de Estado, o mejor dicho, esclavistas, les preocupa más amasar la fortuna que velar por el verdadero poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores cubanos.

Los precios del petróleo en el mercado internacional tienden a la baja, veremos a ver si es verdad que los precios del combustible en Cuba se ajustarán acorde a los precios del mercado internacional como lo anunciaron, o como sucede siempre, nunca bajan.

lunes, 13 de octubre de 2008

Por Lola O. Soler.


El primer cubano que conocí, en este caso cubana, fue cuando yo era muy chiquita, ya que nací en el mismo año que la “revolución” en Cuba. Corría el año 63 cuando Catarina “la habana” llegó a vivir a mi pueblo.
Era una señora alta y delgada como un junco y extrañamente elegante a pesar de vivir en una caseta de tablas, como casi todos los que vivíamos en aquella calle de un pueblo de Cádiz hace ya la friolera de 50 años. En mi memoria aún se guardan los aromas de su cocina, arroz con frijoles y carne de puerco asada, y sobre todo las historias que nos contaba a los niños que jugábamos alrededor de su casa, primero con sus hijos y luego con los nietos que le fueron llegando.
Nos hablaba de un maravilloso país donde siempre hacía calor, de una tierra fértil donde se cultivaba de todo, de los casinos, salones de baile, heladerías, tiendas de ropa con nombres como “El Encanto”, grandes coches que circulaban por amplias avenidas iluminadas como el día, cines, teatros, televisión y cadenas de radios, y no sé cuantas cosas más. Su marido, un hombre serio y taciturno, apenas esbozaba unas tristes sonrisas cuando ella le recordaba alguna anécdota de las vividas en común, apenas le recuerdo, pues murió pronto, creo que de pena de haber dejado aquel maravilloso lugar tan lleno de vida y color.
Para los españoles de aquel entonces era muy difícil imaginarse un lugar así, España era un país más bien triste y gris, donde ya campaba desde hacía unos cuantos años un señor que no le andaba a la zaga al que supuestamente entró para liberar al pueblo cubano, como se ha demostrado a lo largo de la historia, y cuando le preguntaban que por qué había dejado aquel fantástico paraíso para venirse a vivir a nuestro anodino pueblo, nos decía que aquí, al menos, podía salir a la calle sin tener que estar constantemente viendo vallas que le recordase que había alguien que les vigilaba todo el tiempo, ni gente barbuda que la arengaba a luchar en nombre de una libertad que poco a poco había ido desapareciendo.
Ella no entendía de política, solamente sabía que antes podía ir a cualquier lugar a divertirse y a comprar, a reunirse con los amigos en cualquier casa y formar un “guateque”, donde se bailaba y se cantaban canciones mientras que se disfrutaba de un buen vino o de un buen ron. Todo eso hasta que… ¡llegó el comandante y mandó parar!
Ese era su recuerdo más claro, que había dejado de tener Libertad, y eso a pesar de que sólo vivió unos pocos años bajo la “tutela” de los que ella llamaba “los barbas”, la mayoría de las veces señalándose su propia barbilla sin mencionar sus nombres.

Hace ya muchos años que Catarina murió, y a lo largo de los años que la tuve de vecina, nunca dejó de recordar a su preciosa Cuba, aunque cada vez hablase menos de ella. Poco se podía ella imaginar, que su salida fue sólo el principio, que después de ella fueron saliendo muchos más En los setenta, en los ochenta, los noventa, y así hasta el siglo XXI, donde se puede decir que hay casi tantos cubanos dentro como fuera, y que todo sigue igual, no como ella lo dejó, sino como ella se encontró a aquel pueblito gaditano hace medio siglo, o quizás peor.

Aquí no se había construido nada aún, allí simplemente se dejó que se fuese pudriendo lo que el “imperialismo capitalista” había levantado, convirtiendo al país en un pueblo fantasma donde los muertos vivientes pululan por las calles sonriendo al mundo mientras que por dentro lloran pensando en que el mundo exterior los salvará del segundo “libertador” que se ha instalado en las suntuosas mansiones que quedaron en pie para el disfrute único y exclusivo de los “libertadores”. Nunca pudo imaginar George Orwell que su “Rebelión en la granja” se repetiría a miles de kilómetros de la Unión Soviética, pero esta vez de una forma mucho más cruel y más cerca de la realidad de lo que él había escrito en su libro.
Tampoco podíamos imaginarnos ni Catarina ni yo, que un día yo misma me iría a vivir a su añorado paraíso, y que podría conocer de primera mano y con mis propios ojos en lo que se había convertido aquel formidable vergel. Fue al principio de los noventa, durante el llamado “segundo período especial”, del que viví cinco años completos. Ni que decir tiene, y a pesar de las dificultades, que obviamente me enamoré del país, de su luz, de su color, de sus gentes, sus olores, y sobre todo del estoicismo y la paciencia con el que sus habitantes vivían el día a día, y obviamente también, conocí la realidad de las dos Cubas, una para los extranjeros y otra para el cubano, realidad que espero poder contar algún día.
De eso hace ya casi catorce años, y es ahora, cuando los hechos demuestran que todo parece continuar como en una eterna moviola donde los planos se suceden unos tras otro, cuando me he decidido unir en verdad y con todas mis fuerzas a ese pueblo cubano que sigue llorando y sufriendo, convencidos por la enorme maquinaria de un sistema decrépito y anciano, como sus propios dirigentes, que están solos en su lucha por la libertad de la siempre llamada Perla del Caribe.
¡Nada más lejos de la verdad! Esta vez existen medios que no pueden controlar en su totalidad, la bendita @ navega libremente por todo el planeta, y los ciudadanos y cubanos de todo el mundo pueden y saben cual es la triste realidad de su adorado país. Los que se fueron al principio y los que salieron después, todos tienen acceso a conocer tan de primera mano como si lo viviesen allí, lo que realmente sucede. La falta de libertad se va subsanando mediante unos cuantos inteligentes blogs de personas como la creadora de GeneracionY, que cuentan, a pesar de las trabas, como es el día a día de cualquier cubano en la isla. También son muchas las asociaciones que desde allí mismo o desde cualquier punto del globo denuncian la falta de libertad y la necesidad cada día más acuciante de que la Democracia, con mayúsculas se instale de una vez y para siempre en la isla para que puedan regresar libremente al país que los vio nacer.

Es una de estas asociaciones, erigida como la Plataforma Internacional Cuba Democracia ¡Ya!, con su presidente a la cabeza, Rigoberto Carceller, y compuesta por un grupo de personas, algunas de las cuales han vivido en sus propias carnes la realidad de las cárceles y centros de detención en el país, por otras que llevan largos años en el exilio esperando ese cambio que nunca parece llegar, y la mayoría, cubanos profundamente creyentes, testarudos y luchadores, que piensan que la democracia más que un anhelo es un ejercicio personal y social que se le debe al pueblo, cansado ya de cincuenta años de dictadura y falsas promesas, la que comienza a conocerse dentro y fuera de España, y por supuesto la que pretende llegar hasta los más recónditos rincones de la isla caribeña.
En esta plataforma saben que la comunidad internacional no va a hacer por Cuba lo que sólo les corresponde hacer a ellos mismos, y que tampoco Raúl Castro va a llamar a nadie, ni de esta plataforma ni de ninguna otra asociación para negociar pacíficamente una transición a la democracia, y por supuesto, la lucha armada ni tiene cabida en pleno siglo XXI, ni es algo que entre dentro, ni fuera de esos maravillosos corazones que tuvieron que abandonar el país para poder ofrecer un futuro más halagüeño para sus hijos y descendientes.
Es por ello por lo que siguen luchando desde cualquier esquina del planeta, apoyados por ciudadanos libres, y por españoles que también vivieron la falta de la democracia durante muchos años en este país, y que sabemos que el modelo que triunfó en España, también podrá triunfar en Cuba, y el pasado mes de agosto, en el pueblo de Barbate, desde La Galería, en el Paseo Marítimo, se reunieron un puñado de simpatizantes que vistieron con orgullo las camisetas que se confeccionaron para dar a conocer el nombre de esta plataforma en la tierra de Cádiz, tan cercana a la ciudad de La Habana, como cantaba Carlos Cano, proclamando así, y pidiendo en nombre del pueblo cubano, unas elecciones libres, en el que puedan estar representados no sólo los que desde fuera siguen luchando, sino todos aquellos que privados de su libertad gritan desde las cárceles, ¡Cuba!, ¡Democracia ¡Ya!
¡Viva Cuba Libre!

Lola O. Soler
Cádiz

jueves, 7 de agosto de 2008

“Te estamos observando”


Los ojos del régimen cubano se amplían en la zona del malecón del municipio capitalino de Centro Habana, la crisis económica por la que hace años atraviesa el país no ha impedido que cámaras de grabación muy modernas hayan sido colocadas en las esquinas de las calles próximas al “sofá con vistas al mar” más popular del país y del mundo. Las razones argumentadas por el gobierno a la población de la zona son los continuos arrebatos a que han sido sometidos los turistas extranjeros, los policías colocados en casi cada esquina del malecón no han sido suficientes, tal parece que no son muy confiables y hasta ellos mismos serán observados las 24 horas del día.

Sino fuera por la falta de garantía de una dictadura que no respeta los derechos individuales de sus ciudadanos la población de la demarcación estuviera desbordada de alegría, pero no es así, a la preocupación que tienen los residentes de la zona por la “búsqueda” de su subsistencia ahora se suma las de cámaras de televisión que observan los movimientos de cada uno de ellos de día y de noche.

El disgusto de los pobladores de las zonas afectadas no se hará esperar, el mercado negro que ha permitido la supervivencia de muchos de ellos está siendo amenazado, los cables de televisión satelital que se pasan los vecinos para poder ver una televisión variada y libre del control estatal están siendo amonestados, el tráfico de productos y el alquiler clandestino de extranjeros de la zona corren peligro.

En un país libre éste tipo de grabación está prohibido, a no ser que los vecinos del lugar por su seguridad así lo soliciten. No dude usted que desde un lugar oculto una mano lance una piedra o corte el cable que deshaga el aparato que los observa y no cierra los ojos ni para hacerse el sueco. La tecnología usada para fines ocultos no mellará las ansías de libertad del pueblo cubano.

domingo, 20 de julio de 2008

Dos años de cárcel por diferir


Mi vecino Ramón era un preso político. Mongo, como cariñosamente le llamábamos, en los primeros años de la revolución había sido un destacado socialista que por su seriedad, preparación, honestidad y historial de lucha como miembro del Partido Socialista Popular Cubano había ocupado altas responsabilidades empresariales después del triunfo de 1959, pero en el barrio todos lo conocíamos como un contrarrevolucionario y temíamos por aquel ex-presidiario.

Con 18 años de edad, padres integrados a la revolución y años de adoctrinamiento escolar jamás pensé que podía haberme relacionado con tal antisocial, un muro de dos metros separaban el patio de nuestras casas y el primer dialogo fue inevitable. Aquel señor, anciano y muy respetuoso se ganó el aprecio de mis padres y el mío. Un día le pregunté la razón de por qué siendo tan buena persona había estado preso, me respondió, “por defender el socialismo puro”, quedé “frito”, me dijo que el mismo año en que había nacido fue sancionado a 4 años de cárcel, de los cuales cumplió dos, por haber pertenecido al grupo de la Microfracción de Anibal Escalente.

Me contó que desde muy joven se había integrado al PSP porque creía firmemente en el socialismo, que su partido había sido prohibido por la dictadura de Fulgencio Batista y que su libertad muchas veces peligró, pero que fue el régimen de Fidel Castro quien finalmente lo metió en la cárcel y lo envío al ostracismo en el cual todavía vive. Fue sancionado por un delito que no existía en el código penal vigente en la época y la única prueba que mostraron el día del juicio sumario fue una foto publicada en un diario donde saludaba, meses atrás, a su antiguo jefe del PSP Anibal Escalante.

El viejo Ramón es una persona de principios, jamás ha traicionado sus ideales, cuando le pregunté por qué no había pedido asilo político y se había marchado a Estados Unidos, me sonrió, se levanto de su asiento con la lentitud que caracteriza a un anciano, se dirigió a su habitación, a los pocos segundos regresó y mientras mostraba alegre su carné de miembro del Partido Socialista Popular me dijo, “todavía soy socialista”.

sábado, 12 de julio de 2008

¿Cambio o más de lo mismo?

Como todo cubano estaba a la expectativa de esta primera intervención de Raúl Castro en la Asamblea Nacional del Poder Popular. El nuevo jefe de gobierno en, los primeros meses de su mandato, había demostrado algo del pragmatismo por el cual lo identifican. Todavía espero de esta sublime asamblea de comunistas algo de realismo, para ser más preciso, aguardo por un gran paquete de medidas económicas que aumenten aun más las probabilidades de un verdadero cambio como el que ambiciona la mayoría del pueblo cubano.

En casi 50 años de existencia del comunismo en la isla por primera vez escucho un discurso más realista. En nuevo concepto de Raúl Castro sobre el modo de distribución de la riqueza abre la esperanza de reformas económicas, “Socialismo significa justicia social e igualdad, pero igualdad de derechos, de oportunidades, no de ingresos. Igualdad no es igualitarismo”, dijo.

Desde esta tribuna quisiera recordarle a Raúl que esa noción que tiene de justicia social y de igualdad vale también para el inicio de reformas democráticas. La creciente sociedad civil cubana debe de tener igualdad de derechos y de oportunidades, porque existen diferentes formas de pensar y no es correcto mantener el “igualitarismo” en las ideas; en ese campo también se necesita de justicia social y de igualdad.

Reconciliación Nacional, reformas económicas y políticas debieran ser el primer punto del orden del día de la flamante Asamblea Nacional Cubana. El país necesita urgentemente la democratización, la liberación de las fuerzas productivas y el apoyo de la comunidad internacional.

sábado, 5 de julio de 2008

“El país pequeño acosado por el imperio del norte”.

Si he dicho en otras ocasiones que el gobierno cubano comete un gran error al aferrarse a un sistema económico y político óbstelo e inviable, también quería referirme a lo desacertada que ha sido la política internacional de los gobiernos de Estados Unidos hacia el régimen cubano durante casi 48 años.

Revisando el comportamiento de la balanza comercial cubana en el año 2007, según el Ministerio de Comercio Exterior de Cuba, el valor de las exportaciones cubanas aumentaron a 3.701 millones de c.u.c y el de las importaciones a 10.082 millones de c.u.c con un déficit comercial de 6. 381 millones de c.u.c , observando las cifras puedo concluir que el embargo estadounidense no ha tenido la efectividad deseada y que su errada política le ha permitido al gobierno cubano, durante todos estos años, justificar su déficit comercial con el embargo cuando todos sabemos es producto de la ineficacia de su sistema de producción. Si además agregamos que en el propio año 2007 la Asamblea Generalmente de Naciones Unidas votó de forma abrumadora, por 184 a favor y 4 en contra, el levantamiento de las sanciones comerciales de Estados Unidos hacia la isla diríamos que el gobierno americano está completamente sólo en su política comercial hacia el país.

Las sanciones económicas impuestas unilateralmente por la primera potencia mundial ha repercutido internacionalmente a favor del gobierno de la Habana, el régimen ha sabido vender bien su imagen de “país pequeño agredido por el gigante del norte que amenaza su independencia nacional”. Pero no sólo eso, sino que esa política le ha permitido al régimen dictatorial adoctrinar al pueblo cubano con el odio hacia Estados Unidos y a los cubanos exiliados en Miami, justificar sus fracasos económicos durante décadas y reprimir a la oposición interna acusándolos de “mercenarios al servicio del imperio que no cesa en sus aspiraciones de apoderarse de Cuba”.

Soy de los que piensa que la política de aislamiento comercial por parte de Estados Unidos no ha beneficiado la transición democrática en la isla. Creo que el levantamiento de las sanciones económicas a la isla posibilitaría el acercamiento del pueblo americano al pueblo cubano y eso derrumbaría los argumentos esgrimidos por la dictadura por casi 50 años. Mantener a Cuba aislada permite al régimen manipular la información a su antojo y justificar cualquier tipo de represión a la creciente oposición Cubana, un cambio de política desenmascararía a la dictadura ante su pueblo, y ayudaría más eficazmente a la democratización de la isla.

miércoles, 2 de julio de 2008

Necesitamos un gobierno con vista larga.


Según afirmaron ayer expertos de la Oficina Nacional de Estadísticas y del Centro Iberoamericano para la Tercera Edad por primera vez en el 2020 habrá más ancianos que niños en Cuba debido a la elevación de la esperanza de vida, alrededor de 78 años, y a una disminución de la natalidad. Si además agregamos que más de 20 000 cubanos, la mayoría jóvenes, emigran hacia otros países anualmente en busca de mejores condiciones de vida podríamos señalar que el gobierno cubano se enfrentará a una previsión típica de los países desarrollados, con la alta diferencia de que en nuestro país hay una crisis del sistema económico y político que dura más de 18 años y que no se sabe cuanto tiempo más subsistirá.

A los jubilados cubanos de hoy sus pensiones, a cargo de la Seguridad Social, apenas les alcanza para comer la primera semana del mes y se ven obligados a seguir trabajando en empleos estatales menos remunerados, a ejercer cualquier otra profesión en el mercado negro o a vivir de la caridad de sus familiares en el exterior. Los ancianos de la Cuba de hoy han aportado toda una vida de trabajo a un sistema económico y político que durante toda la vida le ha sido vendido como el más justo y el más humano, sin embargo la realidad es bien diferente, muchos están obligados a trabajar hasta el último día de su vida porque el gobierno es incapaz de devolverles adecuadamente las prestaciones que ellos aportaron en su vida laboral.

Las previsiones para el futuro en la isla las veo muy mal. El régimen cubano integrado por ancianos, con condiciones de vida muy distantes a la del resto de su generación, lleva casi 50 años en le poder y sigue enfrascado, con su batalla de idea dentro de la isla, en mantener el estado de las cosas en el país, negando en todo momento las reformas económicas y políticas que el pueblo les exige.

Al régimen totalitario de Cuba les digo que su tiempo se ha acabado, que inicien reformas democráticas desde sus propias filas, que todo es posible. Lograr la unidad de los cubanos sin discriminación ideológica es la tarea número uno en el que debe enfrascarse todo cubano que ame a su nación. Estamos contra el reloj, el tiempo pasa y el daño con los años será mayor.

sábado, 28 de junio de 2008

El Sentido de la Propiedad en Cero


La idea de la socialización de las empresas para que los trabajadores se sientan propietarios de los medios de producción en Cuba ha sido un rotundo fracaso. Los trabajadores cubanos no se sienten interesados en que las producciones de sus empresas vayan en constante ascenso y calidad, sus criterios sobre las mejorías de sus condiciones de trabajo y el aumento de sus salarios son constantemente ignorados por sus jefes, quienes a su vez, se encuentran limitados por el exceso de centralización de las decisiones económicas. El cubano de hoy asocia la propiedad socialista con la propiedad del gobierno y la de su presidente, se aleja cada vez más del criterio socialista de que los trabajadores son los propietarios de los medios de producción.

Lo bajos salarios que reciben de sus empleadores, que apenas les alcanza para comer los primeros quince días del mes, han provocado el saqueo constante de los recursos propiedad del Estado; no solamente se ha perdido el criterio de propiedad, sino que ha servido para malograr valores necesarios para que una sociedad avance hacia un estadio superior, se ha perdido el respeto a la propiedad estatal. En los sistemas capitalistas democráticos generalmente son los dirigentes los que se apropian de los recursos del Estado, en el nuestro es habitual que lo haga cualquiera.

Tal estado de las cosas en Cuba no solamente afecta los valores relacionados con el respeto a la propiedad ajena, sino que veo el daño mucho más allá, se ha perdido el respeto al Estado y el aprecio a la independencia nacional. El daño, que el amo del sistema económico y político actual en Cuba, le está haciendo al pueblo cubano traspasa los límites de la independencia nacional. No permitir que el cubano pueda crear sus propias empresas individuales desarrollándolas sin límites, y el deterioro constante de las empresas estatales con tecnologías obsoletas e improductivas pudiera dar al traste en un futuro con la tatareada independencia nacional. Le recuerdo al régimen cubano que el sentido de la nación surgió con el modo capitalista de producción, que la independencia cubana se podrá conservar siempre y cuando los cubanos podamos participar libremente en todas las decisiones políticas y económicas del país. No realizar reformas a tiempo podría entregar el país en bandeja al mejor postor y lo peor de todo, el cubano de adentro no tendrá dinero, valores morales y poder para hacerle frente a la invasión de capital extranjero que se avecina.

jueves, 26 de junio de 2008

Chasco a Borbotones

Las últimas noticias que he recibido de personas normales en la isla no son nada halagüeñas.

Después de los primeros meses del gobierno de Raúl las medidas que se suponían iban a hacer un cambio para el cubano y que llenaron de optimismo a muchos se han desvanecido. La esperanza y el furor de las primeras medidas del nuevo presidente de la isla se han empantanado, desde allí he sabido de una nueva ola represiva contra los vendedores ambulantes, esos que en las calles venden artículos y comidas hechas en casas, que alivian su situación económica y las de los cubanos. La mayoría son personas de avanzada edad, jubilados y pensionistas que en la primera semana del mes gastan en alimentos sus exiguos pesos cubanos recibidos como compensación de toda una vida de trabajo.

La policía cubana tiene tomada las calles de la capital, en alguna zona como en el famoso mercado de Cuatro Caminos en cada esquina hay uno. Los precios de los productos del Mercado Agropecuario, en pesos cubanos, han subido precipitadamente y muchos se quejan con lágrimas en los ojos. En los mercados de recaudación de divisas, que venden en c.u.c, ya el aumento se había notado. La subida de salario que había ilusionado a muchos cubanos no han aliviado nada, con cada aumento los precios en los mercados suben un por ciento mayor.

El pueblo cubano está muy enojado, las quejas recibidas en millones de reuniones autorizadas por la dictadura no han tenido respuestas significativas, el permiso de salida del país que se suponía iba a ser flexibilizado no acaba de llegar. Los cambios anunciados que habían llenado de satisfacción al pueblo no despuntan, la frustración es total. El estado de las cosas en Cuba va para peor y junto camina de la mano la frustración generalizada, el sistema imperante en la isla demuestra una vez más su incapacidad para resolver la situación crítica del cubano de a pie. Los intereses de la elite gobernante están por encima de cualquier cambio que otorgue libertades individuales. Con tales, personajes no creo en una democratización de la isla a corto plazo.

viernes, 20 de junio de 2008

Levantamiento de las Sanciones Diplomáticas.


Siempre he sido partidario del levantamiento de todas las sanciones económicas y diplomáticas al régimen de la Habana, la prensa internacional se ha hecho eco sobre la medida tomada por Bruselas. Las opiniones a favor y en contra están divididas, el Régimen Castrista sigue reprimiendo a la oposición interna y las medidas económicas que ha implementado Raúl Castro son insuficientes.

Soy de los que opino que las democracias no se pueden imponer desde afuera porque están condenadas al fracaso. La educación cívica debe nacer en cada país desde adentro, los cubanos han vivido durante casi 60 años dos dictaduras que han divido a la isla, han sumido a la miseria a millones de cubanos y arrastrado sangre y dolor durante décadas. El joven país, en los poco más de 100 años de existencia, ha vivido más de la mitad bajo regimenes tiránicos, ha aprendido la lección histórica de que a la fuerza no se puede vivir en paz y desarrollar una nación. Los cubanos de adentro piden cambios, quieren vivir sus vidas sin que nadie les diga como debe hacerlo, sin la intromisión en sus vidas privadas por parte del Estado.

Compete al pueblo cubano decidir con total independencia su futuro, el régimen totalitario está envejecido y acabado, la juventud no acepta las excusas que le han dado sus gobernantes para limitar sus libertades individuales durante toda su vida. Considero importante eliminar todo tipo de presión económica al régimen cubano, ha servido de pretexto y de alimento a una dictadura que desaparecerá de forma natural, el sistema económico y político que la sustenta es obsoleto e inviable. Pido sentido común a la Unión Europea y al gobierno de Estados Unidos, levantamiento de todo tipo de sanción económica y apoyo a los grupos disidente germen de la sociedad civil cubana.

Desde mi pequeña tribuna cibernauta exijo al gobierno cubano la libertad de los presos políticos con la democratización de su sociedad civil y al gobierno de Estados Unidos el levantamiento de las sanciones económicas. El pueblo cubano necesita y exige vivir en libertad.

jueves, 19 de junio de 2008

La hormiga y el Elefante, parte II.


Acabo de leer la última reflexión del “Compañero Fidel”, se llama La Hormiga y el Elefante. El líder de la revolución cubana alardea de prestar ayuda solidaría a diferentes países del mundo a pesar de las presiones de Estados Unidos. Se refiere al gobierno cubano como la hormiga y al de Estados Unidos como el elefante.

No comentaré sobre el contenido del artículo, sino sobre las ironías de la vida, el Comandante acusa al elefante de tratar de pisar a la hormiguita sin percatarse que en la isla también hay un elefante y millones de hormigas. Hace apenas unas horas el elefante en jefe reveló su libro titulado “Fidel, Bolivia y algo más”, en el prólogo emitió criterios descalificatorios sobre la bloguera Yoani Sánchez, una joven cubana de 32 años que desde su blog retrata la realidad de la isla con un lenguaje moderado y respetuoso. La bloguera ejerce un derecho vedado por el régimen para la mayoría de los cubanos, la libertad de expresión. Se las arregla para colocar sus crónicas a pesar de los restricciones que tienen los isleños para acceder a Internet, pero el cerco a su atrevimiento cada día se estrecha más. No basta con denegarle la salida del país para recoger el premio que justamente le fue otorgado por un jurado profesional e imparcial, sino que las amenazas ya el comandante las acaba de puntualizar.

Yoani es una persona non grata para el gobierno cubano. Sabemos que esa declaración puede traer consecuencias funestas para ella, su blog y todo el que desde Cuba trate de imitar su ejemplo. Nada, que desde aquí le advierto al elefante en jefe que ella no está sola en esta lucha, que el hormiguero en la isla y en la diáspora se prepara para alcanzar la libertad que durante años le ha sido aplastada. Me despediré diciendo lo mismo que él, ¡La hormiga pudo más que el elefante!.

domingo, 15 de junio de 2008

Cuba-Venezuela y el efecto boomerang


La afinidad ideológica existente entre el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías y el líder de la revolución cubana, Fidel Castro Ruz ha motivado la firma de numerosos convenios de colaboración entre los dos países, razón para que el flujo de cubanos hacía Venezuela y viceversa se haya multiplicado en los últimos años.

Más de cien mil cubanos han cumplido misiones de trabajo en el país petrolero y otros tantos venezolanos han cursados estudios en el caribeño, ambos líderes han tratado de beneficiarse mutuamente en estos intercambios de ciudadanos, el cubano lo hace para obtener petróleo barato y ablandar la crisis económica más larga de la historia del país, el venezolano lo hace para adoctrinar a sus ciudadanos con la ideología del socialismo del siglo XXI. Las consecuencias para ambos presidentes puede que sea la no esperada, miles de especialistas cubanos aceptan cumplir misión internacionalista en la patria de Bolívar por necesidad económica, la salida del país es la vía para obtener algunos beneficios económicos para ellos y sus familiares, la mayoría no creen en la ideología comunista, sólo buscan sus satisfacción profesional y económica. Compran todo lo que puedan para mandar a Cuba, muchos hacen negocios prohibidos para la misión cubana por dinero extra, sus salarios son mínimos sólo les alcanza para los gastos del mes en un país capitalista, donde las tiendas están abarrotadas de productos y a precios muy inferiores a los de la isla, el gobierno cubano se queda con el resto del salario como esclavos al servicio de sus amos.

Los misioneros de la revolución cubana corren para en el tiempo de la misión abarrotarse de productos y ahorrar dinero, están lejos de sus familiares porque el gobierno cubano teme que juntos puedan desertar. Muchos no van a Venezuela a contar los logros de la revolución cubana, cuentan sus desgracias y vicisitudes, los venezolanos no necesitan que le cuenten, no son tontos, tienen democracia y libertad de expresión.

Por otra parte miles de estudiantes venezolanos viajan a Cuba todos los años, esperan encontrarse con el país paraíso, ese que su presidente quiere construir en su nación, tienen sus escuelas privilegiadas lejos de la población cubana, los servicios son exquisitos, nada comparables con las deplorables escuelas al campo de los isleños. Los profesores pueden que no sean los mejores en su especialidad, pero si son todos revolucionarios e incondicionales al régimen de la isla. Los jóvenes tienen sus restricciones de salida, pero pueden salir. Necesitan conocer cubanos, no están presos y quieren intercambiar ideas con la juventud cubana. En su primer paseo por la Ciudad de la Habana notan que algo no funciona, contenedores de basuras abarrotados, calles llenas de baches, casas semidestruidas, jóvenes que se le acercan para proponerles sexo a cambio de dinero y quejas de escasez de alimento y de artículos de primera necesidad. Se enteran de los bajos salarios de los trabajadores y de la necesidad de cambio del pueblo cubano. Notan la diferencia entre el socialismo cubano contado por los profesores de sus escuelas y la realidad del pueblo cubano.

El efecto boomerang no se hace esperar, la realidad supera a las ideologías obsoletas utilizadas por oportunistas para perpetuarse en el poder. Los sueños de ambos líderes podrían más tarde que nunca convertirse en pesadillas.

lunes, 9 de junio de 2008

La verdad a media.


El gobierno de Estados Unidos incluyó por sexto año consecutivo al gobierno Cubano
en la lista de países a los que acusa de no realizar esfuerzos significativos para enfrentar el supuesto tráfico interno de niños y mujeres con fines de explotación sexual y calificó a nuestro país de destino de turismo sexual. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba rechazó categóricamente el contenido de este nuevo informe del Departamento de Estado, que según dijo, “desconoce y tergiversa la realidad cubana, en su empeño por justificar la criminal política de bloqueo, agresiones y hostilidad del Gobierno de los Estados Unidos contra Cuba”.

Como cubano me sabe muy mal que mi país sea acusado de tráfico interno de niños y mujeres con fines de explotación sexual cuando estoy seguro que los casos que pudieron haber sucedido en Cuba son excepciones. Considero el informe de Estados Unidos exagerados en sus acusaciones al régimen cubano, las leyes penales del país sancionan fuertemente los delitos relacionados con el tráfico interno de niños y mujeres con fines sexuales. En honor a la verdad, creo que el gobierno cubano hace el esfuerzo necesario para perseguir y sancionar este tipo de hecho delictivo, pero la realidad cubana se le va de las manos.

La situación de crisis económica por la que atraviesa el país por ya casi 20 años ha provocado una pérdida de valores morales en algunos sectores de la sociedad cubana. Prostituirse para aspirar a una vida mejor ha sido una necesidad para miles de mujeres y hombres cubanos. Con los salarios pírricos que apenas alcanzan para vivir los primeros 15 días el gobierno no puede garantizar la satisfacción de las necesidades de las familias cubanas, muchos optan por ganarse la vida en el mercado negro, o sacándolas de los almacenes del Estado y otros lo hacen vendiendo su cuerpo. La policía cubana tiene órdenes de perseguir estos comportamientos antisociales penados por la ley, pero este tipo de hecho ya es incontrolable en una sociedad donde muy pocas cosas funcionan.

También el régimen cubano descaradamente miente, dice la declaración del MINREX que “fue precisamente la Revolución la que eliminó para siempre las condiciones que propician el turismo sexual y otros males asociados, que existieron en nuestro país y fueron exacerbados por el dominio neocolonial impuesto a Cuba hasta 1959 por el imperialismo yanki”.

Nada que en esta guerra mediática vale todo, la verdad se cuenta a media, para que las mentiras sean más creíbles. Un amigo cubano una vez me dijo en la isla, “Cuba en 1959 dejo de ser un burdel de Estados Unidos para convertirse a partir de los años ´90 en el burdel del mundo”. No le falta razón, la isla es hoy por hoy un país de destino de turismo sexual.

domingo, 8 de junio de 2008

A propósito del Embargo.

La economía cubana no despega, por lo menos así lo perciben los cubanos en la isla. Según el gobierno cubano el PBI en el 2006 creció un 12,5 % y en 2007 un 8,99 % su formula de cálculo, que incluye el costo de los servicios sociales gratuitos o subsidiados, no es compatible con los estándares internacionales. Hay algunos especialistas internacionales que estiman que esa fórmula beneficia el cálculo entre tres o cuatro puntos por encima de la formula tradicional, como quiera que se compute la economía creció según el régimen, pero el cubano de a pie no lo nota en su bolsillo.

Durante años tuve la oportunidad de participar en la realización de los planes de producciones en varias empresas estatales en las que trabajé. Las dificultades son muchas, no las puedo mencionar todas, pero parto desde la inestabilidad de la fuerza de trabajo generalmente por los bajos salarios, a las limitaciones impuestas por los organismos superiores a las inversiones en la producción, a la falta de liquidez para la compra de materia prima y a las exigencias de los diferentes ministerios de aumentar los planes de producción años tras años. En resumen, el gobierno exige producción y eficiencia, entregando poco a cambio. El resultado no se hace esperar empresas con tecnologías de producción obsoletas, productos con calidad pésima, saldo negativo en sus balanzas financieras e incumplimiento de los planes económicos de producción y finanzas. No pretendo demostrar la ineficiencia económica del sistema socialista cubano, eso ya está hecho, los sistemas que contaron con esa fórmula desaparecieron hace casi 20 años.

No dudo que hayan algunas empresas cubanas en diferentes sectores de la economía que tengan resultados favorables, sino fuera así dijera que el PBI cubano es una gran mentira, sabemos que el sector de los servicios turístico, el tabacalero, el minero con el níquel, y otros tantos más se echan sobre los hombros el peso de la economía cubana, cubren con sus ganancias las pérdidas de sus hermanas pequeñas. En la economía no puede haber paternalismo, le urge al gobierno cubano iniciar reformas económicas que permitan a las empresas introducirse en una economía de mercado, si queremos una economía saludable hay que hacer transformaciones, cambios que le den a las empresas las autonomías necesarias para realizar su gestión económica sin ningún tipo de intervención estatal, que sea el mercado quien mande.

Un distinguido economista cubano, que me vio crecer, me dijo una vez en una conversación privada, “ Ernestico, creo en el crecimiento del Producto Interno Bruto Cubano cuando el pan nuestro deje de ser racionado”.

sábado, 31 de mayo de 2008

Una Isla, dos bloqueos y millones atrapados

El bloqueo de Estados Unidos contra Cuba es el embargo comercial, económico y financiero que se inició el 7 de febrero de 1962 con el objetivo de presionar al gobierno cubano después que declarase que la revolución era comunista. Meses antes, el 16 de abril de 1961 el líder de la revolución Fidel Castro Ruz declaró, sin consulta popular, que la revolución que él había liderado era socialista. Es el comienzo de unos de los bloqueos comerciales más largo de la historia y del inicio de la restricciones de las libertades individuales de los residentes de la isla que los cubanos denominamos “bloqueo interno”.

Ambos bloqueos ha influido considerablemente a que una isla con una posición geográfica estratégica y una belleza extraordinaria tenga una economía en ruina y millones de sus ciudadanos desengañados, necesitados y atrapados. Tanto el embargo de Estados Unidos contra Cuba y las limitaciones de la libertades individuales en la isla han tenido diferentes matices en sus largos años de existencia. Comenzó como una batalla de ideologías, una guerra fría entre dos sistemas que competían por ser más eficientes económicamente y por lograr que sus ciudadanos alcanzasen por diferentes vías satisfacer sus necesidades más imperiosas. Un sistema luchaba por mejorar el estado de bienestar de sus ciudadanos sobre la base de mantener la libertad individual y económica y el otro por llegar a ese objetivo por la senda de la omnipresencia del estado en todas las esferas de la vida anteponiendo el derecho público al derecho privado. El resultado es conocido, en 1989 el sistema político y económico menos justo se desintegró. Ambos bloqueos en la isla debieron dejar de existir, pero no ocurrió así.

La posición geográfica que tantos beneficios económicos nos dio, que pudiera ser un factor importante en la salida de la crisis económico en el futuro, y la postura arrogante y intransigente de los dirigentes de la revolución cubana nos jugó una mala pasada. Millones de cubanos emigraron a Estados Unidos durante 49 años de revolución, hicieron sus vidas en el exilio y han alcanzado un poder económico y político extraordinario en la nación más poderosa del mundo a sólo 90 millas de las costas cubanas. Esos cubanos exiliados han alimentado su odio con los errores catastróficos que ha cometido Fidel Castro durante 49 años de revolución. Durante los años 90 del pasado siglo el embargo dejo de ser un interés del gobierno de Estados Unidos, pero los exiliados cubanos se han encargado no sólo de mantenerlo sino de endurecerlos. Por otra parte, el gobierno comunista de Cuba no acaba de reconocer que el sistema económico y político que ellos construyeron está acabado. Se aferran al poder negando los cambios que el pueblo cubano les exige tanto dentro como en el exilio. El gobierno cubano ha endurecido en los últimos años el “Bloqueo Interno”, niega a base de porrazo el inicio de las reformas económicas y políticas que integren a Cuba en la comunidad mundial y que saque al pueblo cubano del estancamiento, la frustración, desmoralización y desvaloración que han vivido en los últimos años.

Ambas bloqueos deben desaparecer si queremos una Cuba para todos y para el bien de los cubanos. Hay dos extremos, alimentados por años de odio, que empujan por derrotarse mutuamente por la vía de la fuerza, los poderosos líderes del exilio cubano de Miami encaprichados en mantener un embargo anacrónico y los líderes de la revolución cubanas empeñados en mantener el estado de las cosas en la isla, en medio de esas dos batallas está atrapado el pueblo cubano de a pie, ese que sufre las carestía y las necesidades que los otros no padecen. Por suerte la juventud de hoy se desmarca de ambas posiciones.

viernes, 23 de mayo de 2008

El ocaso de un Sistema

El Gobierno cubano se resiste al mundo globalizado, desde la caída precipitada de los países Comunistas del Este. Se enfrenta a una crisis económica que dura 18 años. Los jóvenes nacidos en 1990 cumplen 18 años y sólo han vivido crisis económica y política.

Desde el primer día en las escuelas comienza el proceso de adoctrinamiento de los escolares por el régimen, “!!!Pioneros por el Comunismo¡¡¡, !!! Seremos como el Che¡¡¡, dicen todos con un saludo militar. Les enseñan a leer y escribir, para el gobierno cubano la educación es sagrada; le trasmiten desde pequeño que Fidel es el salvador de los cubanos, que la guerra de independencia de Cuba se inició en 1868 con el grito de de guerra de Yara dado por el criollo Carlos Manuel del Céspedes contra los colonialistas españoles y culmina con la entrada triunfante del Comandante en Jefe en 1959, al sacar a Cuba del dominio norteamericano. Les dicen en los diferentes niveles de enseñanza que el capitalismo es un régimen de explotación del hombre por el hombre, que está en crisis y desaparecerá porque el comunismo es la fase superior de la evolución social. Les enseñan que el único responsable de la crisis que vive Cuba es el bloqueo norteamericano que niega la entrada de recursos al país, que los cubanos de Miami son unos mafiosos y terrorista que desde 1959 han hecho de todo para derrocar el comunismo en Cuba. Les enseñan que el Partido Comunista de Cuba es la organización política de la clase obrera y guía de la sociedad, que la propiedad estatal es de todos, que Cuba es una potencia mundial en medicina, que es un país solidario y que tiene el sistema económico y político más justo del mundo. En fin, que Cuba es un paraíso terrenal, ejemplo de humanidad y de respeto a los derechos humanos.

Pero la realidad supera la ficción, estos mimos jóvenes, mientras en clases reciben los mejores elogios del sistema que los gobierna, en casa escuchan a sus padres, tíos, abuelos y hasta a los vecinos quejarse porque sus salarios nos les alcanza para vivir, escuchan que el bloqueo norteamericano dura ya 48 años, pero que antes la caída del bloque socialista del este europeo vivieron bastante bien, que hasta el salario les alcanzaba para comer, para vacacional y darse el lujo de hospedarse en un hotel. Que los soviéticos subsidiaban a los cubanos con miles de rublos y que el dinero se despilfarró en guerras “solidarias” y en política, que la industria cubana está en ruina porque el Estado es el peor de los administradores. Observan a miles de jóvenes que se prostituyen para darse el lujo de comer y poder vestir mejor, a los que tienen trabajo por cuenta propia darse el lujo de tomarse un cerveza en una cafetería en divisa, a los que venden y trapichean en el mercado negro ganar en un día lo que sus padres ganan en un mes en los centro de trabajo estatales, observan como siendo Cuba una potencia médica los hospitales están en ruinas y no ofrecen buenos servicios a los enfermos ingresados, que los militantes del partido comunista no hacen lo que dice y que pertenecen a una clase superior dentro del sistema. Observan como sus hermanos mayores buscan la vía de abandonar el país porque en Cuba han perdido toda esperanza de mejoras, aprenden con los miles de turistas extranjeros y los exiliados cubanos que en los países capitalitas tienen tanto o más derecho que en el que viven y que el paraíso terrenal que les enseñan en la escuela no es como lo pintan.

Y todavía los ancianos que gobiernan por casi 50 años dan la última batalla, las de las ideas, para que la juventud conserve el sistema que construyeron y que le ha costado tanto dolor y sufrimiento al pueblo cubano.

jueves, 22 de mayo de 2008

El Socialismo del Siglo XXI, ¿La Futura Esclavitud?

Existieron geniales pensadores de las Ciencias Sociales y de Humanidades que no vivieron para ver en la práctica el fruto de sus teorías, estos hombres tuvieron el gran mérito de ser vastos en sus abstracciones y de prever el futuro tejiendo sus ideas con los eventos estudiados del pasado y del presente que les tocó vivir. Dentro de estos destacados pensamientos hay algunos muy conocidos como la Teoría de la Separación de Poderes, del Barón de Montesquieu (1689-1755), y otros no tan conocidos como el tratado La Futura Esclavitud, del Ingles Herbert Spencer (1820-1903). Leyendo este último accidentalmente cuando estudiaba en la Universidad en Cuba me di cuenta que Spencer había retratado mi país un siglo después de su muerte.

En América Latina hay algunos gobiernos que tienen cierta tendencia a lo que ellos llaman el Socialismo del Siglo XXI, Herbert Spencer ya en el siglo XIX la llamaba la Futura Esclavitud para conocimientos de todos trato de resumirlo en este spot.

Iniciaba Spencer su tratado diciendo “como victorias crecientes de la idea socialista, y concesiones débiles de los buscadores de popularidad, esa nobilísima tendencia, precisamente para hacer innecesario el socialismo, nacida de todos los pensadores generosos que ven como el justo descontento de las clases llanas les lleva a desear mejoras radicales y violentas, y no hallan más modo natural de curar el daño de raíz que quitar motivo al descontento”, ya en el siglo XIX se temía que esas ideas de “pensadores generosos” fuesen utilizadas por líderes populistas que prometiendo mejoras a los pobres llegarían al poder y realizarían cambios radicales y violentos, que más que mejorar la situación de los pobres, satisfagarían sus apetitos de poder.

Decía el sociólogo británico, “que al llegar a ser tan varia, activa y dominante la acción del Estado, habría este de imponer considerables cargas a la parte de la nación trabajadora en provecho de la parte páupera, se iría debilitando la acción individual, y gravando la condición de los tenedores de alguna riqueza, sin bastar por eso a acallar las necesidades y apetitos de los que no la tienen”; quisiera recordar que Spencer no conoció la revolución bolchevique de Octubre, ni imaginó que el Estado, en nombre del pueblo, se adueñaría de la economía nacional eliminando todo tipo de iniciativa privada causante de los desastres económicos de los llamados países comunistas del este y de Cuba. Decía Spencer que “el Estado crearía un cúmulo de leyes adicionales, y cada vez más extensas, que la regulación de las leyes anteriores de páuperos causa”; está claro que para mantener el igualitarismo que promueve el Estado tendría que dictar leyes prohibitivas e impopulares, agregaba el filósofo que “semejante empresa aumentarían de terrible manera la cantidad de empleados públicos, ya excesiva. Con cada nueva función, vendría una casta nueva de funcionarios”; en Cuba para cada tipo de prohibición se ha creado una entidad que controle el cumplimiento de la Ley a través de su equipo de inspectores, sin contar los funcionarios de más en los diferentes niveles de los organismos de administración del Estado y de las empresas.

Dijo Helvert con razón que “todo el poder que iría adquiriendo la casta de funcionarios, ligados por la necesidad de mantenerse en una ocupación privilegiada y pingüe, lo iría perdiendo el pueblo, que no tiene las mismas razones de complicidad en esperanzas y provechos, para hacer frente a los funcionarios enlazados por intereses comunes. Como todas las necesidades públicas vendrían a ser satisfechas por el Estado, adquirirían los funcionarios entonces la influencia enorme que naturalmente viene a los que distribuyen algún derecho o beneficio”, sin comentario. Añadía “el hombre que quiere ahora que el Estado cuide de él para no tener que cuidar él de sí, tendría que trabajar entonces en la medida, por el tiempo y en la labor que pluguiese al Estado asignarle, puesto que a este, sobre quien caerían todos los deberes, se darían naturalmente todas las facultades necesarias para recabar los medios de cumplir aquellos. De ser siervo de sí mismo, pasaría el hombre a ser siervo del Estado. De ser esclavo de los capitalistas, como se llama ahora, iría a ser esclavo de los funcionarios. Esclavo es todo aquel que trabaja para otro que tiene dominio sobre él; y en ese sistema socialista dominaría la comunidad al hombre, que a la comunidad entregaría todo su trabajo. Y como los funcionarios son seres humanos, y por tanto abusadores, soberbios y ambiciosos, y en esa organización tendrían gran poder, apoyados por todos los que aprovechasen o esperasen aprovechar de los abusos, y por aquellas fuerzas viles que siempre compra entre los oprimidos el terror, prestigio o habilidad de los que mandan, este sistema de distribución oficial del trabajo común llegaría a sufrir en poco tiempo de los quebrantos, violencias, hurtos y tergiversaciones que el espíritu de individualidad, la autoridad y osadía del genio, y las astucias del vicio originan pronta y fatalmente en toda organización humana”, concluyó.

Claro que Spencer tuvo errores, ya José Martí se encargo de señalar algunos, por eso les anexo el enlace de su obra para que cada cual la lea y saque sus propias conclusiones.

http://www.literatura.us/marti/futura.html

domingo, 11 de mayo de 2008

Torpeza

Para evitar falsas interpretaciones sobre mi posición política lo primero que quiero decir es que me declaro opositor al régimen cubano, pero ciertamente hay noticias que leo en el diario de Miami El Nuevo Herald que me sorprenden ingratamente, aunque no deja de ser mi fuente de información favorita sobre Cuba. Hay informaciones sobre hechos en la isla y en la diáspora que las recibes de primera mano por este informativo de Miami, pero la libertad de expresión y de asociación con mucha frecuencia son utilizadas como una Espada de Damocle por el Régimen Cubano.

Hay dos noticias sobre hechos ocurridos en Estados Unidos y referidos a Cuba que para mi criterio son grandes torpezas políticas. La primera de ellas fue la conversación que tuvo el presidente de Estados Unidos, George W. Bush con varios líderes opositores en Cuba. Ya el régimen se ha encargado de sacarle partido catalógando una vez más a los disidentes de la isla como mercenarios al servicio del imperialismo yanqui. La otra ha sido la manifestación de un grupúsculo de cubanos en contra de la participación de deportistas cubanos en un campeonato internacional de judo en Miami. Parece que los organizadores de esa protesta son partidarios de que en la isla no hayan cambios políticos, a ellos les digo que en Cuba diariamente el régimen hace política con las actitudes intransigentes y equivocas de algunos exiliados en Miami. Estoy seguro que sin intención alguna, le están dando la razón a la propaganda política del gobierno en contra de un cambio político en la isla.

Diariamente allí le acrecentan los temores a los cubanos hablando sobre la pérdida de sus propiedades expropiadas a los exiliados en caso del regreso de estos y de la independencia del país en caso de un cambio político. Le recomiendo tanto al presidente de Estados Unidos, como a los organizadores de la manifestación de Miami que se informen mejor antes de realizar estos actos que le dan ventaja a la agonizante batalla política del desgastado régimen cubano.

sábado, 10 de mayo de 2008

Que desilusión

Desde hace años tengo por costumbre leer noticias sobre Cuba por diferentes fuentes ya sean críticas o a favor del gobierno. La página digital del periódico Granma, Órgano Oficial del Partido Comunista, es una de ellas. Hace semanas me ilusionaba leer los días viernes la sección Cartas de los Lectores. Las críticas suaves a algunos errores económicos del sistema por parte de los ciudadanos estaban siendo publicadas tal y como la concebían, parecía que el gobierno de Raúl definitivamente se dirigía hacia una apertura en el país. Pero que desilusión, el viernes antepasado sólo se publicó aquellas críticas que contenían conductas corruptas y antisociales, o sea, se permitió publicar los escritos sobre los efectos y no sobre las causas de los problemas como se estaba haciendo, y por último, este viernes ni siquiera salió la sección.

Llama la atención que este cambio de posición del diario suceda días después de la represión a las Damas de Blanco en la Habana y a la negativa de salida del país de la Bloguera Yoani Sánchez.

¿Todavía crees que el gobierno de Raúl inicie una apertura hacia la democracia tal y como la conciben los países de occidente?